El secretario de Organización del PSOE, Luis Pizarro, ha venido a decir hoy lo que ya era una obviedad con patas, un rumor extendido por los mentideros políticos, que son chivatos y marujos por los codos: Torres Vela se paseará por el Corpus como candidato. Sebastián Pérez dijo hace unos días algo parecido, cuando anunció que el 27 de mayo se designará un puñado de candidatos populares para 2007. Los dos partidos mayoritarios dan por hecho que antes del verano comenzará una campaña electoral ‘oficiosa’ de uñas de gato, despiadada como tantas otras, cainitas con los parientes lejanos y llena de incertidumbre, donde nadie se jugaría a doble o nada su propia cabeza. Yo había notado algo parecido cuando Sebastián Pérez apareció en rueda de prensa en la plaza del Carmen después de tiempo inmemorial para meter sus dedos en el ojo sociata, pringándose en charcos en los que nunca ha chapoteado ni con botas de agua; el ‘hache dos o’ metropolitano de la discordia, que si firmo o no firmo y por el camino yo me entretengo. El PSOE espera este fin de semana una visita ilustre para echarle a Torres Vela el brazo por encima del hombro izquierdo. Lo que me pregunto es que harán ahora todos aquellos que decían que hablarían cuando llegase la hora; sobre todo cuando Pizarro les ha dicho que las primarias fue un invento que no va con ellos.