Ya sólo falta que cuatro rojos trasnochados vayan a hacer la puñeta el sábado cuando se alce al viento en la avenida de la Constitución la bandera de España.
Y a esto que despierta Torres Vela de su letargo silente y suelta un par de zurriagazos. “Pepe, que has subido un 100% los impuestos y dijiste que no lo ibas a mover un pelo”; “Pepe, que la Gran Vía te ha costado un potosí y no lo cuentas”.
Esto ya si es campaña y no el muermo de la política ciudadana, los ceniceros, los palomos cagones, las banderas, las banderitas y los banderines. Leña por un tubo. Demasié.
Entretanto, se conoce la enésima de Ogíjares y Del Ojo, el compadreo, los arreglos verbales, los alambiques administrativos, las cuentas pendientes…
Ahora el PP lo mismo encarga en Ogíjares un informe interno.