Lola no ha respetado ni la tregua de los cien días y ya ha dado hoy su primera rueda de prensa. Luego servirá de algo o probablemente no habrá servido de nada, pero es la mejor forma de no estafar a los ciudadanos y de currarse el sueldo. Por lo menos, dar la lata y ser la mosca cojonera de un gobierno municipal que ahora más que nunca puede campar a sus anchas si le dejan.
Todavía es pronto para recriminarle a los socialistas que siguen dormidos. De momento, Lola les ha vuelto a ganar la voz y la mano.
Y esto ocurre mientras se negocian los sueldos en el Ayuntamiento. Me cuentan que el PSOE quiere igualarse con el equipo de gobierno por arriba y que IU pretende hacerlo pero a la baja. Esperemos que, al menos, cobren lo que se merezcan.