Los futuros hosteleros, formados por el grupo Meliá
Ya han pasado más de 1.600 alumnos en los 21 años que tienen los cursos. Este dato nos lo daba, con el buen talante y profesionalidad de siempre, Ramón Martínez, director de los hoteles Sol y Nieve y Sierra Nevada de la cadena Meliá. Y lo mejor de todo, como añadía Martínez, es que el 80% de estos alumnos se quedan a trabajar en el grupo hotelero. Este Centro de Formación lo dirige desde su inicio el profesor Antonio Morcillo, otra querida institución de la hostelería andaluza. De los 21 años que se llevan realizando los curso de formación en el hotel Meliá Granada, son unos 9 años los que también se realizan en los dos hoteles que tiene Meliá en Sierra Nevada. Estos cursos cuentan con el apoyo, patrocinio y certificación de la Junta de Andalucía. De hecho, el acto de clausura del curso estuvo presidido por el delegado de Economía de la Junta en Granada, José Antonio Aparicio. También estuvo con el director Ramón Martínez, Alfonso del Poyo, director general de Meliá y Tomás Ruíz, director del hotel Meliá Granada. Tras las entrañables palabras de los directores y el alcalde de Monachil Félix Rodríguez se paso a una degustación de algunos de los platos que han aprendido los alumnos y que estaban servidos por los de servicio de sala. Jorge Acereto, el activo y buen jefe de cocina de los dos Melía en Sierra Nevada había realizado un gran trabajo de organización y docencia, pues el buffé lucia esplendidamente. Tanto el director Ramón Martínez, como el, estuvieron todo el tiempo controlando y pendientes del desarrollo.
Destacar, primero la buena presencia de todos los alumnos, tanto de cocina como de sala. Un aspecto de agradecer cuando de dar de comer se trata. Y después la variedad de platos que presentaban. Lo que significa un arduo trabajo previo en los fogones. Presentaciones actuales y actuaciones de los cocineros perfectas. Había que ver como servían las viandas a los invitados, o como cortaban el rosbif, elaborado en su punto con una lograda salsa de acompañamiento. Hasta las tortillitas de camarones estaban en su punto.