Sería mucho más divertido que, en lugar de boicotear el botellón del 17 de marzo, nuestros políticos y dirigentes se sumaran a la parranda; festín juvenil donde las ideas se beben en vaso de plástico. Yo también quiero hacer botellón, que para una cosa en la que en Granada somos líderes, aunque le pese a la Junta, no vamos a fastidiarlo. Lola Ruiz Domenech (IU) llevará un macetón de ‘cubalibre’, aunque ella sea más de vino ‘peleón’, que da batalla hasta en la siesta. Nino y Sebastián Pérez beberán dry Martini, siempre agitado pero sin mezclarse. Están invitados a este botellón, que para convivir hay que ‘con-beber’. El PSOE llevará whisky de ‘reserva’, a ver si entre los suplentes encuentran el candidato que no hallan entre los titulares. El vino lo pone Chema, los vinos de ‘Rueda’. El subdelegado del Gobierno vendrá con el secretario de UGT, Mariano Campos, y así montarán el tándem cervecero Antonio ‘Cruz’-Campos -ésta era la pamplina del día, no desesperen-.
Gabi, tú no debes de mezclarte con esta movida de garrafón, que tú eres más sibarita y lo que te gusta es beber a contracorriente Vega-Sicilia. La delegada de la Junta, mártir netural entre tanta afrenta al POTAUG malherido, rostro de no haber roto nunca un plato, vendrá con ron ‘Santa Teresa’, bebida espirituosa. Lola Ruiz, lengua viperina, espera que el alcalde también traiga ron, pero ‘Cacique’; su frase favorita es la de “Pepe Torres ha hecho del Ayuntamiento su cortijo”. Yo le he dicho a Lola que no diga estas cosas ni aunque estemos de broma, que el alcalde se cabrea.
Sebas sólo pide vino del pueblo, para ir ganando mérito en su carrera a la Diputación. Y otros muchos, que dicen tantas fantasmadas, mejor que beban agua.
Arenas sigue pidiéndole a Chaves ‘mozo, sírveme otra copa rota’, a ver si esta vez no me llevo el mal trago de la derrota. Y los hay, muchos y muchos, que nunca se van del sillón de la política, que este sí que es un botellón sin vigilancia policial, y siempre piden la ‘penúltima’. Y lo mejor es que nadie se descuide aunque se crean colegas de movida, porque a la más mínima, en el ruedo de la política, alguien te brinda por la espalda: “Arriba, abajo, al centro y… pa’dentro”. Y te vas a tomar por saco.